Hoy quiero hablaros de un aceite limpiador que he incorporado a mi rutina de cuidado, Cleansing Oil de la firma Sarah Becquer, fundada por la farmacéutica Mar Sieira, quien se ha propuesto cambiar nuestra forma de ver los aceites con las fórmulas de Sarah Becquer. Fórmulas aptas tanto para las piles con tendencia a la sequedad como para las pieles mixtas con tendencia a grasa.
El maquillaje contiene aceites al igual que la piel del rostro la produce. Además, las impurezas que se depositan en los poros de la piel son también oleosas, por los que eliminar todas las impurezas y el maquillaje es más sencillo con las fórmulas oleosas, que las eliminan con total suavidad.
Cleansign Oil de Sarah Becquer cuenta con una fórmula natural elaborada a base de aceites vegetales que han sido cuidadosamente seleccionados: Aceite de Argán, Aceite de Almendras Dulces y Aceite de Jojoba:
- Aceite de Argán, de gran poder antioxidante, suaviza, protege e hidrata la piel, evitando su envejecimiento prematuro.
- Aceite de Almendras Dulces, altamente hidratante, previene el envejecimiento de la piel, la suavidad y reduce las manchas.
- Aceite de Jojoba, con un 97% de ceramidas muy similares a las de la piel, ayudan de forma mimética tanto a la reparación como al mantenimiento de la estructura de la piel además de neutralizar la acción de los radicales libres gracias a sus propiedades antioxidantes.
Una fórmula que elimina el maquillaje sin esfuerzo y sin resecar la piel, ya que al mismo tiempo que limpia la piel y elimina el maquillaje, repone el aceite de la piel, dejándola perfectamente limpia e hidratada y tan suave que casi no necesita la aplicación de más hidratación.
El envase contiene 100ml y su precio recomendado es de 39,90€.
Una textura a medio camino entre un aceite y un bálsamo, que te seduce con su suavidad y con el delicioso aroma que desprende, que te envuelve y logra que el momento del desmaquillado se convierta en un momento de auténtico placer.
Lo aplico directamente sobre la piel seca y lo masajeo, comprobando como se va derritiendo literalmente el maquillaje. Después, basta con empapar una muselina en agua tibia y limpiar con ella suavemente la piel. Con tres veces que paso la muselina por la piel, tras limpiarla, mi rostro queda impoluto, sin restos de maquillaje ni impurezas. La piel queda muy suave, con una textura más alisada y con los poros más afinados, señal del alto poder de limpieza que consigue este producto.
También me ha ayudado bastante para limpiar la piel, aunque no esté maquillada, cuando vuelvo del trabajo, son muchas horas con la mascarilla puesta y la piel no respira como necesita, creándose granitos e incluso algún eczema. Llego a casa, me ducho y me limpio la piel con este aceite, os aseguro que me encanta el resultado, ya no tengo ni las marcas que dejaron en un principio esos granitos en la zona del mentón.
Para quienes estéis interesados, podéis adquirir este producto en Farmacias y en la página web de Sarah Becquer.
Cleansing Oil, el limpiador facial de Sarah Becquer, cuya fórmula natural elaborada a base de aceites vegetales y apta para todo tipo de pieles, elimina el maquillaje y las impurezas de la piel mientras la hidrata, dejándola perfectamente limpia, más suave y confortada.
By Raqueleita
Que cosa mas ideal guapa. Besitos
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